8 de junio de 2015

TRABAJO DECENTE Y PROBLEMATICAS DEL TRABAJO DECENTE



Rita Cortese es la presentadora de la Serie de Canal Encuentro (Argentina) denominada Trabajo Decente. En esta serie se intenta dar respuesta a los siguientes interrogantes: ¿A qué se denomina “trabajo decente”? ¿Cómo se combate el trabajo infantil? ¿De qué forma se generan la igualdad de oportunidades y el acceso al trabajo?  y otras problemáticas del mundo del trabajo a través del testimonio y la documentación de historias de vida.

La serie esta compuesta por cuatro episodios que se encuentran disponibles en la plataforma de Canal Encuentro, y en You Tube

La serie con

http://www.encuentro.gov.ar/sitios/encuentro/programas/ver?rec_id=103643

Trabajo decente - Programas - Canal Encuentro



Trabajo Decente. 

El Trabajo es una actividad económica-social, realizada por el hombre que le permite obtener un ingreso económico necesario para satisfacer sus necesidades,  a la vez que facilita el progreso social, a sus familias y comunidades,

El concepto de trabajo decente fue propuesto por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) a fines del siglo XX, en un contexto socio-histórico crítico, de fuerte deterioro de las economías, de las condiciones de trabajo y de la idea misma de trabajo.

El “trabajo decente implica acceder al empleo en condiciones de libertad y de reconocimiento de los derechos básicos del trabajo. Estos derechos garantizan que no haya discriminación ni hostigamiento, que se reciba un ingreso que permita satisfacer las necesidades y responsabilidades básicas económicas, sociales y familiares, y que se logre un nivel de protección social para el trabajador y los miembros de su familia. Estos derechos también incluyen el derecho de expresión y de participación laboral, directa o indirectamente a través de  organizaciones representativas elegidas por los trabajadores y trabajadoras” (“Explora. Construir Futuro con trabajo Decente” MTEySS, Ministerio de Educación y OIT. Argentina 2012. Pág. 12)

Según visualizamos en el Video ”TrabajoDecente: un mundo mejor comienza aquí” podemos identificar las características del mismo:

  Erradicación del trabajo infantil;

  Erradicación del trabajo forzoso;

  No más desigualdad;

  Prohibición de trabajos peligrosos;

  Libertad de asociación sindical;

  Libre expresión;

  Dignidad laboral;

  No discriminación Laboral;

  Derecho a la seguridad y protección social;

  Mejor calidad de vida y una jubilación digna;

  derecho a una correspondiente retribución por el trabajo realizado

  estar libres de un trabajo excesivo, tanto por su duración como por su intensidad, y, en este sentido, la conciliación del tiempo del trabajo con el tiempo de vida

Prioriza el “trabajo Digno”. Donde el sueldo que ganamos alimenta, educa, nos brinda seguridad y protección, nos da una mejor calidad de vida, nos permite tener una mejor jubilación, etc no solo para nosotros como individuos sino también para nuestra familia.

Viendo más allá del video. Trabajo decente es un derecho humano, significa: trabajo registrado, salario justo (acorde  a la ley), igualdad de oportunidades, periodos de descanso (ya sea entre jornadas o vacaciones), vacaciones pagas, protección social, ambiente seguro, sindicalización…. Es importante que conozcamos , y como docentes dar a conocer a nuestros alumnos, los derechos que tenemos y que los mismos se encuentran legislados, más allá de toda reglamentación interna organizacional, en la Constitución Argentina. Es importante reconocerse como sujeto de derecho y agente de cambio.

Como escuela, como directivos, como docentes DEBEMOS involucrarnos en la realidad de nuestros niños. ¿Es nuestro trabajo? creemos que sí. Que antes que profesores de matemática, de lengua, de ciencias, somos profesores de la VIDA. Hay que enseñarles a nuestros alumnos DIGNIDAD, algo que en los sectores más marginales (y en los que no lo son tanto) pareciera no existir, o ser una letanía.

¿Cómo enseñarles? ¿Con qué actores? Cada segundo que pasamos con ellos es una posibilidad de acercarles una palabra, un conocimiento, un consejo.

Desde lo formal pueden organizarse talleres con profesionales de concientización, aunque creo que con voluntad es algo que cualquier persona puede transmitir. En estos talleres deben participar alumnos, padres, docentes, directivos y toda la comunidad que rodea a la escuela. Los coordinadores de curso, aunque no todas las escuelas los tienen, son personas que pueden hacer de enlace entre los alumnos, la comunidad, etc. Creo que, aun con la escasez de personal y de recursos que hay en las escuelas, sobran herramientas para aportar un granito de arena y empezar a hacer la diferencia  y dejar de lado la indiferencia.

No naturalizar las condiciones indignas de nuestros alumnos y sus familias, no etiquetarlos de “casos perdidos”, Aprovechar cada clase, cada reunión, crear espacios y talleres de concientización para la comunidad entera. Después de todo, las escuelas deben ser espacios abiertos para toda persona que quiera aprender y mejorar.

 El trabajo Decente es un derecho, un derecho humano, un derecho social, que implica varias dimensiones:

  • Empleo
  • Protección social
  • Dialogo social
  • Igualdad de oportunidades
  • Libertad
  • Aplicación de las normas internacionales de trabajo.

El concepto de “Trabajo decente” se reinstala desde la idea de que  el problema del “trabajo no es solo un problema de cantidad sino también de calidad.”2

El trabajo decente demanda a una valoración moral y ética de acuerdo a la postura asumida por la OIT, que no puede estar subordinada a la economía, a sus transformaciones en la globalización como tampoco puede estar subordinada a las crisis financieras. La Organización Internacional del Trabajo promueve que el desarrollo económico sea acompañado de un desarrollo social paralelo; los países deben generar oportunidades de trabajo para todas las personas, trabajos decentes de calidad que contribuyan al bienestar de los trabajadores de todo el mundo.

El logro de las condiciones de trabajo decente supone el desarrollo de acciones que han sido agrupadas por la OIT en función de cuatro objetivos:

El sociólogo francés Robert Castel en el artículo Regreso a la dignidad del trabajo, plantea que el trabajo tiene tres componentes:

  • el “no empleo”
  • “la sobrevaloración del trabajo como imperativo categórico para ser respetable”
  •  y un "no trabajo" del que surge la estigmatización del que no trabaja desde la idea de ociosidad culpable.

El primero hace referencia a la falta de trabajo, la no existencia de suficientes puestos de trabajo y la existencia de muchas  personas que desean trabajar. Lo que no lleva al segundo aspecto: las personas que tiene trabajo se sientan amenazadas a perderlo, esto los lleva a aceptar cualquier tarea sin tener en cuenta las condiciones laborales y las personas  desempleadas al ofrecerse en el mercado laboral aceptan cualquier trabajo para poder sobrevivir y dejar de vivir del que trabaja y así ser socialmente respetado.

Y por último, existen los llamados pobres malos, que son considerados por muchos como aquellos que viven a expensas o son parásitos de los trabajadores, quienes ven que sus salarios se adelgazan, para sostener y mantener a estos que viven mediante ayudas sociales, que sin el mínimo sacrificio obtienen dinero fácil. Sin embargo, algunas personas, prefieren convertirse en trabajadores pobres, cuyos esfuerzos y tareas, no son recompensados, las leyes laborales no son ejecutadas, sus salarios son indignos, no adquieren beneficios ni protecciones sociales, pero deben soportar y aceptar, esas condiciones para no ser un desempleado o desocupado. De esta forma, se institucionalizan y normalizan trabajos precarios reapareciendo la inseguridad social y con ella la degradación del trabajador y en consecuencia la calidad de ciudadano.

La sociedad ve de mala forma a la persona desempleada considerándola ociosa, estableciendo perjuicios de discriminación, indicando que no desea de salir de su situación actual. Con respecto a esto se da dos alternativas: las personas que no encuentran trabajo ya que el Estado es incapaz de crear los suficientes puestos laborales (de servicios, de industrias, de comercio, etc.) y otros que se encuentran inmersos en planes sociales, donde le resulta más fácil el subsidio y no buscan un empleo.

Castell, en el mismo artículo hace también referencia a la “Rehabilitación del Trabajo”, que todas las personas en edad de trabajar podamos acceder y gozar del mismo en condiciones dignas.

El trabajo decente demanda una valoración ética y moral, es la mejor manera de luchar contra la pobreza global, la discriminación y la explotación en todas sus dimensiones.

La socióloga Verónica Millenar, en “El Tiempo del Desempleo. Transformaciones en el mundo del trabajo y sus Efectos en la Subjetividad” nos lleva  a reflexionar acerca de aquella persona que se encuentra desempleada, pero que sin embargo se encuentra ocupada, que trabaja para su comunidad, en un proyecto de gestión colectiva para poder sobrevivir.

Desde el punto de vista semántico, el calificativo “decente” distingue el trabajo como algo digno, satisfactorio, suficiente en calidad y en cantidad. Es una definición fuerte, si se tiene en cuenta que en el mundo actual predominan las condiciones injustas, inapropiadas, precarias y exiguas. Este déficit de trabajo decente se traduce en una oferta de empleo insuficiente, una protección social inadecuada, la denegación de los derechos en el trabajo y deficiencias en el diálogo Podemos mencionar como ejemplos de Déficit de trabajo Decente: el desempleo,  el empleo no registrado o “en negro”; el trabajo forzoso, el trabajo infantil; la no igualdad de oportunidades, basada en algún tipo de  discriminación; entre otros.